En otro tiempo, una máquina imprescindible para el hortelano sonsecano.
Técnicamente la noria es una máquina utilizada para la elevación de agua por tracción animal de origen árabe.Sebastián de Cobarrubias, en el siglo XVIII, la define así: "La máquina de ciertas ruedas con que se saca agua de lo bajo a lo alto en los alcaduces enjeridos en la corona de mimbre"
Su base de sustentación son dos pilares de piedra berroqueña, llamados riostras, que suelen formar cuerpo con el brocal. Sobre ellas, y uniéndolas va un madero, el puente, con una borriquilla (dos maderas de media caña) en el centro que sujeta el eje de la rueda horizontal, la llamada devanadera. Ésta hace engranaje con la rueda del agua, la situada en forma vertical,que hace mover la maroma sin fin con los cangilones sujetos a ella.
Cangilones vertiendo agua a la artesuela desde la cúal de conducirá a la arqueta.
El árbol, o eje vertical lleva dos agujeros en su parte superior donde se introducen las palancas de madera, formando un ángulo agudo. Gracias al balancín atado en la palanca de atrás, los tiros y el horcate, se puede uncir la caballería, que va a mover la noria siempre con los ojos tapados por un trapo, el tapaojos. Anda por una vereda circular, alrededor del pozo, sobre el andel.El agua que sacan los cangilones va cayendo en la artesuela, recipiente alargado fabricado generalmente en chapa galvanizada con la pared del fondo en forma semicircular adaptándose a la forma de la rueda y evitando a la vez que el viento se lleve el agua fuera.
El líquido elemento sale de la artesuela por un agujero y discurre por un canal hasta la arqueta y de allí por otro conducto exterior o interior(subterráneo) a la alberca, donde se almacena.
Alberca en el paraje del Canto Redondo, Cordel de las Merina, entre Sonseca y Ajofrín.
Parte o pieza curiosa a destacar en la noria es la tranquilla. Es una horquilla, generalmente de madera, que sujeta a una riostra y encajada en la varilla de la rueda de la devanadera, oscila de tal manera, que cuando la actividad de la caballería cesa, mantiene todo el mecanismo en reposo, impidiendo que por el peso del agua contenida en los cangilones, la noria se vaya hacia atrás.
Dice un proverbio: "Arlcaduces de noria, el que lleno viene vacío torna"
Los cangilones, por su parte, llevan un agujero en su base para aliviar el agua, aminorando así el peso y por consiguiente la resistencia de la tranquilla.
En los siglos IX y X, los bereberes y muladíes se establecen en nuestro término con algunos mozárabes. Utilizan la noria para sacar el agua de los pozos y con ella regar los cultivos de sus huertas.
Huerta en el paraje de Miraflores, por la veredilla de Mazarambroz
En 1943, según la prensa escrita, existían unas 500 huertas en Sonseca, algunas de ellas con varías norias.
En 1943, según la prensa escrita, existían unas 500 huertas en Sonseca, algunas de ellas con varías norias.