Juan Hernández, el presidente de la Cofradía de San Antón, reparte ayudado por varios cofrades tostones, puches y limonada en un día bastante desapacible.
La brasa que se formó en la luminaria ayudó a dulcificar la fresca temperatura de la noche de la víspera.
La Asociación Cultural Ecuestre El Arreón asistió a la bendición de los animales como es costumbre desde su creación.
El coadjutor, Don David Casas, fue el encargados de bendecir los diversos animales que se dieron cita en la entrada de la iglesia parroquial.
Abundaba los canes, las mascotas más generalizadas en la actualidad.
La Banda Juvenil Municipal amenizó la fiesta dando un toque sonoro.
César Gutiérrez, un amante de la caza con galgos.
Santos Sánchez Cabello asiste cada año con un gallo distinto. Se ha convertido en un clásico de la fiesta.
Los fotógrafos de la Asociación Gran Angular quisieron inmortalizar con sus instantáneas el acto.
La procesión terminó en la ermita del Cristo de la Vera Cruz donde en una peana se puede rezar a San Antón durante todo el año.
El cerdo que acompaña tradicionalmente a la imagen de San Antón.
