Transcribo literalmente de la publicación Historia de Sonseca en anales del profesor Don Francisco Gil Gallego, concretamente de sus páginas 286 y 287
Fue la primera que se promulgó en España y suponía el inicio de un nuevo régimen y la transformación de muchas estructuras absolutistas por otras liberales. Tal fue la importancia que dieron los españoles al nuevo Código, que los diputados de las Cortes gaditanas estimaron por conveniente el deber de conocer y jurar a todo el pueblo español, según los decretos de 18 de marzo y 22 de mayo.
La relación y descripción de todos los actos de Sonseca fue enviada a las Cortes por su escribano y notario, D. Eugenio Rufino de Montes el 14 de setiembre.
Un día antes, el 13, el Ayuntamiento reunido en pleno y formado por D. Ramón Gil de Olaún y Briones y Blas Ruiz Tapiador, alcaldes; Antonio Benito y Justo Calderón, regidores; D. Juan Gil de Olaún y Briones, alcalde de la Hermandad; Antonio García Aranda, procurador síndico general; Francisco Cebreros, diputado de abastos; y Florentino Martín Berdinos. Junto con el escribano, capitulares, el Sr. D. Santiago Ramírez, cura párroco; D. Dámaso Mª Carrasco, teniente del Regimiento de Infantería de Toledo, con la tropa de su mando; y los alabarderos de la Virgen de los Remedios; se dirigieron a las siete de la mañana al camino de Ajofrín para esperar a D. Manuel López Terrados, que había sido comisionado por la Junta Superior de la provincia para hacer pública la Constitución. Este señor entregó al alcalde, D. Ramón Gil de Olaún un ejemplar que fue puesto en una bandeja de plata y llevado por todos los concurrentes a la plaza del pueblo, donde estaba colocado un tablado bien adornado con el retrato del Rey Fernando VII.
Allí, en la plaza, el alcalde "... en altas e inteligentes voces dijo: oíd, oíd, escuchad, atender, atender, esta es la Constitución política que ha de regir la monarquía española, sancionada..."
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| Ermita de la Virgen de los Remedios |
A continuación, fue leída por el escribano, estando todo el público en silencio, y se cerró el acto con la publicación del Real Decreto de 25 de mayo por el que se concedía indulto a presos y reos.
Después se pasó a la Ermita de Nuestra Señora de los Remedios, donde se estaban celebrando por esos días los cultos propios de su festividad, y allí se dijo una Misa en cuyo ofertorio se leyeron algunos artículos, y en la plática se comentó. Finalizada la Misa, se procedió al juramento de la Constitución sobre los Evangelios por las autoridades, el clero y todo el pueblo, y con el canto de un Te Deum terminó el acto.
A continuación, se volvió con toda solemnidad al Ayuntamiento, y tanto las calles de la carrera como la plaza estaban adornadas con diferentes cortinas y paños franceses; ya en las casas consistoriales la tropa hizo una descarga de fusilería entre aclamaciones, viva y repique de campanas.
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| Iglesia de Casalgordo |
Días más tarde se organizó otro acto en memoria y honor del rey cautivo Fernando VII.
Como vemos, Sonseca, al igual que todos los pueblos de España, rindió sus mejores honores a esta primera Constitución, participando en los actos con la mayor algarbía y festejo, como señal de la gran esperanza puesta en ella.
